Merienda navideña en el Palacio de las lanas

Mochila Pirata

Esta vez la mochila de los piratas la han encargado para una niña, no todas adoran a las princesas y el rosa, el papá de Candela me comentaba que a la pequeña le encantan los piratas, los caballeros y que quería que su pirata tuviera dos coletas!!

Vamos todo un cambio, acostumbrada a las princesas y las hadas que tanto gustan a las pequeñas, no puede ser que todas tengan el mismo gusto no?

Pues al parecer a Candela le ha gustado mucho su mochila, seguro que la lucirá encantada a su pirata!

Calcetines y algo más

Estoy atrapada entre lanas y agujas... hacía mucho que no tejía y mucho menos calcetines, pero desde hace unos meses me he enganchado, en realidad esta entrada estaba escrita desde octubre, pero por unas cosa sy otras la vengo a publicar ahora. Ya llevo 4 pares de calcetines y  èste que ven en las agujas está acabado y con su nueva dueña, mi hermana, tengo que sacarle una foto para que vean lo bonito que quedó, cambiamos el modelo básico que me enseñaron en su momento por otro un poco más elaborado, no mucho que me pierdo ;) y que queda muy vistoso, claro que con la lana que estoy usando es normal que los calcetines sean vistosos, tiene pinta de que van a ser preciosos.

Este par de calcetines está hecho con lana Katia Olé, en la foto de la etiqueta sale una muestra del tejido que no tiene nada que ver realmente con la lana, salen las rayas poco uniformes y en la realidad quedan muy bonitas:

Tuve ciertos problemas a la hora de hacer el talón... uffff no había forma de que me salieran bien, después de mucho deshacer y deshacer y consultar, al final conseguí que salieran medianamente decente, el segundo mejor que el primero la verdad.

A parte de calcetines he estado con mis mochilas, bolsas, baberos, cambiadores...

Bolsa de merienda: Bailarina

Poco a poco voy a ir actualizando el blog, tengo algunos trabajos que no he publicado en su debido momento, les va tocando. 

Como el caso de esta bonita bolsa de merienda, con una bailarina guapisima bailando bajo las estrellas, con una sobredosis de rosa, porque a la niña en cuestión le encanta el rosa, o eso me dijo el pajarito que me encargó la bolsa de merienda. 

Y era cierto, a Virgina le gustó mucho, al igual que a sus padres. Sólo falta que le de mucho uso y la llene de deliciosas meriendas.